A mi llegada a Málaga en 1989 uno de los locales de ocio que más me llamó la atención fue el Café Bar Ricardo, donde servían exquisitos Dry Martinis que se consumían en la barra de un local que evocaba a los más famosos de La Habana (Cuba) y que, según algunas fuentes, sus cócteles sedujeron a la mismísima Ava Gardner cuando visitó la capital malagueña en 1955.
Café Bar Ricardo. |
Instalado en un portal de la calle Larios, en la actualidad el número 1, fue parada obligada para degustar el aperitivo antes de almorzar o cenar en alguno de los celebres restaurantes de la zona.
Portal, en la actualidad, donde se ubicaba Ricardo. |
Atendido por Ricardo, su magnífico barman, al que todavía se puede ver paseando por Larios, los clientes se situaban en unas altas y elegantes banquetas de madera. En torno a la barra era habitual ver congregados a destacados integrantes del mundo de la cultura de la época. También se cuenta que allí se hicieron sabrosos negocios.