Mastodon Málaga y sus historias: Picasso en Málaga

jueves, 18 de octubre de 2018

Picasso en Málaga

Pablo Ruiz Picasso había regresado a Málaga a finales del año 1900 en compañía de su amigo Carlos Casagema, poeta y pintor, con quien se aloja en la pensión Las Tres Naciones, situada en la calle Casas Quemadas. Después de unas semanas de estancia, abandona la ciudad a principios de 1901 para no volver jamás.
 
Sede del Museo Picasso de Málaga.
El pintor viajó a Málaga para pedirle a su tío Salvador Ruiz Blasco1.200 pesetas con las que pretendía librarse del servicio militar. Picasso no llegó a recibir el dinero, dado que las relaciones con su tío se deterioraron seriamente puesto que éste no aceptaba el bohemio modo de vestir del pintor ni las correrías protagonizadas con su amigo Carlos durante los días que pasaron en la ciudad.

La realidad es que la figura de Pablo Picasso sufrió un elevado rechazo social, principalmente por su ideología izquierdista, sobre todo por parte de las autoridades locales, provinciales y nacionales del régimen franquista, que con el transcurso del tiempo y el incremento del éxito, el prestigio y la fama del artista, fueron cambiando de postura, a mi juicio, hacia una posición bastante hipócrita.

Al margen de este comentario, se hace conveniente mencionar la oportunidad de conocer la vinculación de Picasso con su tierra a través de la exposición colectiva de 200 obras, “El sur de Picasso, Referencias andaluzas”, que comisariada por José Lebrero, se puede ver en el Museo Picasso de Málaga hasta el 2 de febrero de 2019.


Una exposición que a juicio del crítico del diario ABCJuan Francisco Rueda, evidencia “con indudable eficacia, la «atadura» de Picasso a una herencia que, nunca mejor dicho, se convierte en yacimiento arqueológico del que, a lo largo de su carrera, se auxilia «acarreando» materiales que recontextualiza en numerosísimas obras y en muy distintos tiempos”.