Mastodon Málaga y sus historias: Motines de militares en 1923

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lunes, 8 de julio de 2019

Motines de militares en 1923

Al embarcar para África los soldados de diferentes cuerpos destinados a cubrir las bajas procucidas en el protectorado de Marruecos, el 22 de agosto de 1923, se producen gritos subversivos aplacados con dificultad por los oficiales. El miedo a morir en una guerra a la que iban a la fuerza fue el desencadenante de la revuelta.

Un grupo de los amotinados.
Algunos soldados arrojan municiones al muelle del puerto de Málaga y otros del Regimiento de Garellano sacan una bandera de Vizcaya que tuvo que arrebatarles un oficial.

Al día siguiente, tropas llamadas a embarcar por la tarde recorren la ciudad emborrachándose y promoviendo escándalos. Otros soldados, a la hora del rancho en el Cuartel de Segalerva, se resistieron a embarcarse y salieron a la calle armados, entre gritos subversivos.

Estos incluso dispararon sobre un suboficial de Ingenieros, José Ardoz, que al intentar detener a los sediciosos recibió dos disparos, uno en la frente y otro en el pecho que le causaron la muerte. Más tarde los amotinados batieron varias calles disparando y prorrumpiendo en gritos. La ciudad quedó desierta, cerrada a cal y canto.

Los embarcados procedentes del Cuartel de Capuchinos también se sublevan y se enfrentan a las fuerzas del orden. Unos 700 soldados fueron embarcados en el vapor Barceló y los demás perseguidos.

En la revuelta se trató de incriminar a varios anarquistas malagueños y al cabo Sánchez Barroso, que había admitido la participación en los sucesos como consecuencia de la ebriedad. Condenado injustamente a muerte, fue indultado poco después. Este motín decidió a las autoridades a trasladar hasta Almería el punto de embarque de las tropas.

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