A finales del siglo XIX hubo en Málaga varios cafés con el nombre de Café del Turco, uno de ellos se encontraba en la plazoleta que forma la calle Santa Lucía al desembocar en calle Convalecientes. El local pertenecía a Manuel Romairones, conocido como "Romayó". Aunque el cante y el baile flamenco constituían su principal espectáculo, también se hacían funciones de teatro. Fueron célebres también sus bailes de carnaval, desfilando por él las comparsas. Por ejemplo, en 1886 actuaba en él la célebre comparsa carnavalesca gaditana Las Viejas Ricas de tanto éxito en Málaga, donde realizaron muchas actuaciones.
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Ubicación del Café del Turco. |
El local, situado en la planta alta, era magnífico por su amplitud y estaba integrado por dos grandes salones formando escuadra. A la derecha de la entrada principal estaba situado el escenario, no muy grande dado el carácter del establecimiento, y frente a él había varios palquitos, donde se reunía el personal más selecto.
El Café del Turco tuvo un final trágico. Una noche del año 1896, entre una y dos de la madrugada las campanas de la Catedral comenzaron a sonar dando los toques acostumbrados para anunciar que se trataba de un incendio en el centro de la capital.
«El cielo, hacia la parte de la Iglesia de los Mártires, mostraba rojizos resplandores y con dirección a aquel lugar acudía la gente presurosa. En la Plaza del Turco, el café que ella dio nombre, aquel local de alegría y jolgorio hasta entonces se veía envuelto en llamas, que en rojas y gigantescas lenguas salían por los amplios ventanales. Crepitaban las maderas y, de vez en cuando, el desplome de algún techo, tabique o muro, producían un siniestro ruido. Mientras se luchaba contra el fuego, que no se conseguía dominar, la alarma cundió a los vecinos de las casas colindantes, principalmente de la calle San Telmo, cuyos inmuebles lindaban con sus espaldas con el café. Procuraban poner a salvo sus ajuares y, precipitadamente, sacaban a la vía pública muebles y enseres, en medio de voces, advertencias e imprecaciones, que, con el natural del incendio y la gente que acudía, aumentaba la confusión y comenzaba a susurrarse que el incendio había sido intencionado», narraron las crónicas de la época. Después del incendio el solar fue una carbonería, una lechería y más tarde se utilizó como depósito de Cerveza Victoria. Actualmente es un bloque de pisos.
Fuente documental: Historia de la hostelería malagueña (Grupo de Facebook). Andrés Guevara García.
Interesante historia.
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