Rosita Díaz Gimeno fue una de las actrices más importantes del cine español durante la Segunda República Española. En los años 30, marchó a Hollywood al igual que otros actores de la época, para participar en las versiones españolas de películas estadounidenses. Pero pronto regresó a España y siguió actuando para la gran pantalla hasta la Guerra Civil. Rosita Díaz fue muy amiga de Luis Buñuel, al que conoció en los estudios de la Paramaount en Joinviville (París) antes de la guerra. Ya en el exilio, mantuvieron su amistad en Estados Unidos.
Rosita Díaz Gimeno. |
Rosita Díaz estaba casada con el hijo mayor del jefe del gobierno republicano, Juan Negrín, lo que hizo que se viera forzada a exiliarse tras la derrota de la República. Volvió a los Estados Unidos, donde llegó a ser profesora en la Universidad de Princeton. También trabajó como actriz de teatro y cine tanto en Nueva York, donde finalmente se instaló, como en México.
La profesora Ana María Espinar en su libro 'Historias y anécdotas de Málaga y sus gentes', incluye una curiosa hstoria relacionada con la actriz. Ocurrió en febrero de 1933, cuando la famosa Rosita Díaz Gimeno viajó a Málaga y se alojó en el hotel Caleta Palace, pero a los pocos días viajó a Ronda con el propósito de localizar en plena sierra al bandido Pedro Flores Jiménez, sobrino del famoso bandolero Francisco Flores Arocha, que había escapado del tiroteo en el que falleció su tío dos meses antes, en diciembre del 32.
La actriz quiso conocerlo porque en Francia iba a protagonizar una película sobre la vida del bandolero muerto a tiros ‘El bandido de Ronda’. Para que nadie la reconociera en Ronda, se hizo pasar por inglesa y se colocó peluca y gafas. Sin embargo, mientras recorría en coche los pueblos de la Serranía en busca del sobrino bandido, se enteró de que el alcalde rondeño había mandado detenerla, y la actriz tuvo que dejar la provincia a toda velocidad. También fue detenida en Córdoba durante el rodaje de El genio alegre, al inicio de la Guerra Civil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario